DURMIENDO CON TOROS

¡Tranquilos todos, que no me he equivocado… ¡ Verdaderamente quiero saber cuántos de vosotros ¿dormiríais entre toros de Santa Coloma? Desde aquí, no alcanzo ni a ver, ni a oír vuestras respuestas, pero, estoy segura que más de uno (y de dos, y de tres…) estarían encantados de vivir semejante experiencia.

¿Os imagináis lo que debe ser abrir la ventana por la mañana y encontraros… con varios toritos… asomados a la reja? Mª Jesús Gualda, 5ª generación al frente de la ganadería El Añadío (antes Hnos. Gualda), pensó  un buen día en transformar las antiguas viviendas de los mayorales en un pequeño hotelito con encanto (con mucho sabor) en el que los  huéspedes, aparte de disfrutar de un tranquilo y relajado fin de semana alejados del mundanal ruido, pudieran  también participar de las labores del campo.

(Fotos de Público.es)

Mª Jesús, es sincera y no tarda en entonar el “mea culpa” ganadero… nos cuenta que no corren buenos tiempos para las ganaderías y que salvo tres o cuatro “privilegiadas”, el resto atraviesa momentos difíciles. La ganadera no oculta que precisamente para hacer frente a las dificultades derivadas de estos difíciles momentos, se le ocurrió la idea de abrir este hotelito.

(Finca El Añadío. Fotos de Andrea Cauli)

 

Aunque es su deseo aclararnos, y yo la creo, que detrás de la toma de esta decisión no sólo subyace el interés de ayudar a la ganadería con los ingresos del hotel… sino también, y esto es lo que verdaderamente nos ha emocionado, el deseo de que la gente conozca al toro en su hábitat natural. Mª Jesús reconoce que hasta ahora el mundo ganadero ha sido extremadamente cerrado y proceloso… opina que ya es hora de que el ganadero se abra y dé a conocer la grandeza del toro bravo.

(Portada de la Revistas Tierras Taurinas Nº 3 Santa Coloma)

 

El Añadío, no sólo nos propone pernoctar en un emplazamiento idílico, antiguas casonas de piedra decoradas con extremo gusto y mimo, sino también disfrutar del día a día en la vida de una ganadería. Si preguntas a Mª Jesús por las actividades que se pueden desarrollar… franca hasta el extremo, te dirá que “lo que toque”. Allí nada está preparado, no hay trampa, ni cartón… tampoco vaquillas resabiadas de tanto entrar al trapo.

(Finca El Añadío. Fotos de Andrea Cauli)

 

Nos contaba la ganadera que sus últimos huéspedes estuvieron “acrotando” becerros… esto es… poniéndoles los crotales (marca identificativa, aclaración para profanos) un poco, a modo de apadrinamiento. De forma que antes de marcharse se llevaron incluso una copia de la ficha del becerro, con todos sus datos para seguir su trayectoria.

 

 

(Finca El Añadío. Fotos de Andrea Cauli)

El ejemplo del Añadío debería cundir en el resto de ganaderías, el primero de los intereses del ganadero tendría que ser dar a conocer el animal que cría… y muy poco se sabe del toro bravo y de su vida en el campo.  

(Toro de Juan Luis Fraile. Revista Tierras Taurinas)